Destinos económicos en carnaval: El Balneario oculto para descansar en Buenos Aires
El fin de semana largo de carnaval representa uno de los feriados más destacados de la primera mitad del año, convirtiéndose en una excelente oportunidad para hacer escapadas. No obstante, muchas familias o viajeros que desean salir a pasear con amigos o en pareja, no cuentan con un presupuesto amplio.
Afortunadamente, en la provincia de Buenos Aires existen opciones más accesibles pero igualmente atractivas para disfrutar de un gran paseo.
Una de ellas se encuentra a solo 50 km de Tandil, específicamente en el balneario de María Ignacia Vela, que se destaca como una alternativa económica para disfrutar de la naturaleza en plena temporada de verano.
¿Te gustaría visitar esta excelente atracción que invita a relajarse y disfrutar de momentos agradables? A continuación, te contamos los detalles principales para que no te lo pierdas.
Escapadas de carnaval al Balneario de María Ignacia Vela: una oportunidad atractiva y accesible
En Tandil se encuentra uno de los secretos mejor guardados para experimentar una experiencia única rodeado de naturaleza y escapando de la rutina diaria: el Balneario de María Ignacia Vela, un oasis donde el agua fluye entre las piedras y desemboca en un amplio piletón.
Este hermoso balneario, que es una propuesta natural por excelencia, también es una opción perfecta que no es muy conocida y se recomienda disfrutar especialmente durante el fin de semana largo de carnaval, ofreciendo la posibilidad de acampar sin costo y estar en armonía con el entorno.
El lugar concentra una energía única en la cual los visitantes pueden sumergirse en campos verdes, observar la fauna autóctona y dejarse llevar por el sonido del agua que corre sobre grandes piedras.
Está rodeado de altos árboles, parrillas y mesas pintorescas decoradas con venecitas, todo muy cerca del agua. Un gran parque verde con juegos para los más pequeños y gigantescas piedras distribuidas estratégicamente se convierte en el lugar encantado de los niños.
Cruzar la tranquera que divide la calle de tierra y entrar al Balneario es abrir paso a un lugar donde la paz y las comodidades se encuentran en cada rincón.
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Cómo llegar al Balneario de María Ignacia Vela
El encantador predio del Balneario de Vela se encuentra ubicado en el camino que conecta las localidades de María Ignacia (Vela) y Gardey.
- Desde la ciudad de Buenos Aires, se puede llegar tomando la Ruta Provincial 29, con un viaje que tiene una duración aproximada de 4 horas y media.
- Desde Tandil hacia Azul, por la ruta 226, se debe tomar el acceso a Gardey y recorrer 11 km. A mano derecha, podrás encontrar el centro turístico y recreativo.
- También se puede acceder al Balneario de María Ignacia Vela a través de la ruta N°74, a una distancia de 50 km de Tandil.
Más allá del Balneario de María Ignacia Vela: qué actividades se pueden realizar durante el fin de semana
El pueblo rural de Vela, con su ambiente mágico, singular y seguro, es el destino ideal para aquellos que buscan vivir una experiencia enriquecedora. Esta localidad ofrece mucho más que su famoso balneario:
- El Museo Histórico y de Ciencias Naturales “Doctor Aurelio de Lusarreta” es una ventana al pasado, destacando elementos que relatan la historia del pueblo, que ha sido fuente de inspiración para las obras del reconocido escritor Osvaldo Soriano.
- En el corazón de Vela se encuentra El Prado Español, un complejo recreativo con piletas gratuitas para adultos y niños, abierto de martes a domingo.
- La panadería La Estrella Argentina, con más de 70 años de tradición, es una parada imperdible para disfrutar del mate y exquisiteces horneadas en un horno a leña centenario.
- Como parte de la experiencia gastronómica, se pueden visitar la parrilla Shire y La Vera Pizza Velense en el Centro Social Velense.
Otra excelente alternativa es dirigirse a Gardey, para lo cual hay que recorrer 15 km por un camino de tierra. Allí, el Histórico Almacén Vulcano ofrece deliciosas empanadas y platos típicos. Las opciones de alojamiento incluyen casas contenedor, mientras que la plaza cuenta con una refrescante pileta pública para el disfrute de locales y turistas.
