El pueblo sumergido hace 38 años emerge revelando tesoros de un maestro de la arquitectura
Si sientes el llamado de lo desconocido y deseas emprender un viaje hacia un lugar de llamativa historia en el país, marca un espacio en tu calendario. Un sitio de significativa carga histórica, ubicado en Argentina, te está esperando.
A tan sólo unos 500 kilómetros de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), encontrarás una ciudad que, tras vivir su época dorada, fue relegada al olvido, solo para resurgir y captar de nuevo la atención de propios y visitantes.
Después de un catastrófico suceso en 1985, Villa Epecuén, se recuperó para convertirse en uno de los destinos turísticos más apreciados en la actualidad. Aquí te presentaremos más de su resurgimiento.
Villa Epecuén: Un Testimonio del Poder de la Naturaleza y el Arte Arquitectónico
Estamos hablando de Villa Epecuén, que sufrió una inundación devastadora en 1985 después de una fuerte tormenta seguida por la crecida del Río de la Plata. Fundado en 1921 a la vera del lago Epecuén, en el partido de Adolfo Alsina, este pueblo posee aguas de notable salinidad.
Dicho atributo natural condujo a la creación de balnearios termales, aumentando el flujo turístico. Pese al desastre del ’85, la ciudad se repuso y hoy es un polo de atracción para un sinnúmero de visitantes cada año.
Así se encuentran algunas estructuras de Villa Epecuén, motivo por el cual está entre los 5 pueblos fantasmas de Argentina que cautivan con sus leyendas y misterios.
Viaja a Villa Epecuén desde CABA: Un Viaje en el Tiempo
El trayecto desde la CABA hasta este monumento al pasado y presente argentino lleva aproximadamente 7 horas, constituyendo el lugar perfecto para una escapada de fin de semana. No sólo ofrecen fascinantes ruinas para recorrer, sino también una inmersión en la historia local.
La Joya Arquitectónica de Francisco Salamone en Villa Epecuén
Dentro de sus atractivos, Villa Epecuén resguarda una notable construcción diseñada por el ingeniero y arquitecto Francisco Salamone. Su ex Matadero marca un punto de referencia cultural entre la localidad de Carhué y las ruinas de Villa Epecuén. Este edificio histórico jugó un papel crucial en la vida de los habitantes, incluso tras la inundación.
Este enclave histórico se ha convertido en un imán turístico, y su importancia trasciende incluso al mundo del entretenimiento. Un hecho curioso es que el reconocido artista Abel Pintos eligió este escenario para filmar uno de sus videoclips.
❗No te pierdas la oportunidad de testificar la magnificencia de este sitio con tus propios ojos. También puedes aprovechar de conocer: La Emergente Carhué: Destinos de Aventuras Termales y Encanto Natural.
