La casi desconocida Villa Jesuita que cautiva con su historia en Argentina
Argentina, una nación de vasta extensión y diversidad, presenta una amplia gama de destinos cautivadores para los entusiastas del turismo. Aunque destinos como Mendoza, Bariloche y las Cataratas del Iguazú son populares, no todos los viajeros disfrutan de los lugares concurridos. En el noreste del país, alejado de los circuitos turísticos más frecuentados, se encuentra La Cruz, un pueblo que conquista el corazón de sus visitantes con su enriquecedora cultura y serena belleza.
La Cruz, situada en la provincia de Corrientes, es un vivo reflejo de la historia y tradiciones de la región. Establecido oficialmente en 1620, este pueblo fue testigo de la influencia de los jesuitas en el área, evidenciado en diversos sitios históricos y culturales que aún subsisten.
La Cruz, un rincón lleno de historia
Uno de los legados más significativos de aquellos tiempos es el antiguo reloj jesuita, una obra de ingeniería que continúa marcando el transcurrir del tiempo y da cuenta de la avanzada tecnología de la época colonial.
Esta reliquia tiene una altura de 5 metros y una inscripción en latín que reza: “desde la salida del sol hasta el ocaso, alabado sea el nombre de Dios”.
Atracciones imperdibles
Explorar La Cruz es adentrarse en un entorno de calma y conexión con la naturaleza. El pueblo se enorgullece de su acceso al río Uruguay, brindando oportunidades ideales para la pesca, el canotaje y apacibles paseos a lo largo de la costa.
Para aquellos en busca de una vivencia cultural, el Centro Cultural del Bicentenario exhibe relatos sobre la abundante historia local, y durante todo el año se pueden disfrutar de festivales que celebran desde la música folclórica hasta la cocina regional. Además, en el corazón de la ciudad se erige una antigua iglesia que alberga una virgen esculpida por aborígenes jesuitas.
Los entusiastas de las excursiones deben explorar “Tres Cerros” si se encuentran en La Cruz. Esta formación montañosa está rodeada por un embalse creado para potenciar la producción de arroz.
La Cruz es el destino perfecto para aquellos que buscan evadir el bullicio de las urbes y sumergirse en una atmósfera de calma y autenticidad. La hospitalidad de sus residentes, junto con la rica herencia cultural y natural, convierten a este lugar en una joya escondida en el corazón de Corrientes.
Foto cabecera: Antiguo Reloj Jesuita (disponible en corrientes.tur.ar).
